Alt+Tab: toogle.com

“The net is a big bad dangerous super-highway”

toogle@c6.org

El arte de la segunda mitad del siglo XX se ha valido de absolutamente todos los materiales para representar y/o intentar crear formas que representen ideas. Por qué entonces, en pleno siglo veintiuno, no había de llegarse a utilizar Internet como material para hacer arte.

La sección de Alt+Tabulador pretende mostrar una reseña del arte que se hace con el instrumento red. Nuestro primer ejemplo ilustra muy bien las ideas que quiero exponer:

toogle (vean cómo usarlo al final de este artículo)

La obra del colectivo (Gran Bretaña, Suecia, Noruega, Nueva Zelandia, Rumania…) c6 es según su manifiesto una muestra de E.D.A. (Event Driven Afunctionality)-Afuncionalidad guiada por evento- un efecto creado cuando una audiencia es provocada a participar en un sistema productivo. Este proceso aleatorio altera el mensaje y el medio dentro del que se emite y crea un diálogo impredecible y en capas, entre el que ve y el artista que ha construido el medio.

Técnicamente la obra es impecable, de factura milimétrica, si quiere comparársela con una pintura sin rebabas de óleo y de dibujo magistral, creo que se puede perfectamente. Dentro del medio hay claramente diferencias a pesar de que pueda pensarse que crear una obra que funcione perfectamente es más fácil con el ordenador. Ni mucho menos.

El que entra en la pieza, porque siendo la pieza un portal se entra en ella simplemente al darle al hipervínculo (una gracia de accesibilidad que tiene el net-art), se topa con un formato de buscador que imita el más utilizado en el mundo. En la pieza, igual que en el buscador, la palabra más buscada es Sex y la segunda Bush. La tercera es un actor porno --prueba de la concurrencia femenina (o gay)-- y la cuarta es pussy. La interactividad es clave para casi todas las piezas de net-art y el juego en este caso parece serlo también. El medio fusiona imagen y texto o traduce texto a imagen pero traduciendo a la vez ceros y unos a texto y reconstruyendo imagen reconocible, un lío tremendo pero bastante divertido. La imagen reconocible es la primera que aparece en el buscador por una suerte de azar no azaroso de combinaciones numéricas que la “favorecen”.

¿Por qué es arte o por qué se inserta en el mundo del arte y no en el de la mera experimentación de freakies del ordenador? Uuh, buena pregunta. La intención pomposa de c6 escapa un poco mis límites de entender la tecnología y los discursos que por medio de ella se intentan llevar a otros campos de pensamiento. Entonces… yo no sé si es arte. Lo que sé es que me interesa que se le llame así y que se me presente como arte, y que se me presente como arte hecho con la red. Da un poco igual si la pieza en concreto es o no arte, porque el hecho de que se haga arte con la red es lo que me parece interesante.

El colectivo trabaja con la red, con sms, con emails, virus informáticos, archivos ejecutables que se van pasando entre personas…siempre medios que provocan reacciones y/o comportamientos que en su forma estándar resultan familiares para los usuarios de estos medios. La obra es siempre de participación colectiva y deslocalizada, igual que el uso de la red y las comunicaciones en línea, donde el tiempo real se altera y el individuo no es más que IP.

Al entrar he buscado mi nombre, encontrándome con una foto que hice hace años, he buscado el de mi marido y me he topado con su homónimo beisbolista hecho de los caracteres de su nombre, con el experimento me cuestionaba la identidad de los caracteres o de los nombres propios. España es una especie de mapa extraño de la Puerta del Sol, Spain un mapa, Guatemala una bandera, Art una guerrera en cómic y Arte la Capilla Sixtina. El nombre de algo nos remite a la primera imagen que encuentra por llamémosle, decisión electrónica y con el nombre construye su imagen. La representación del texto y la construcción con el mismo nos dejan pensando en los múltiples recovecos y opciones de la búsqueda. El propio instrumento google es interesante como fenómeno de ordenamiento y selección de información. Con esta pieza se revierte ese mecanismo de utilidad conviertiéndolo en mero ocio para el curioso, en herramienta para anular la información y convertir lo definido del nombrar algo en una nueva construcción.

Tras pensarlo un rato y dejar el juego, empieza uno a querer crear partiendo de la herramienta, volviéndose uno el artista o al menos sintiendo por un momento que buscamos lo que nadie está buscando, así al poner el número 1 me sale una nebulosa de unos, al poner la “a” lava volcánica y buscador es un google de b-u-s-c-a-d-o-r-e-s…

Estamos en constante frenesí de ventanas o pestañas…dando al Alt+Tabulador o cerrando y abriendo pestañas, buscando palabras en el espacio en blanco, tratando de dar con nueva información que nos defina en píxeles la vida, total, que nos metemos en contra dirección por la super-highway.